A pesar del frío, el buen tiempo hace que la gente salga a pasear y a disfrutar del mar. La foto ha sido sacada desde la zona del estadio de Riazor. Este hombre meditaba mientras contemplaba el paisaje.
La siguiente foto podría haberse sacado hace mucho tiempo excepto por los coches modernos que se ven en ella. En la misma aparece el tranvía, recuperado después de bastantes años. Parado en Riazor, su fin de trayecto, recorre gran parte del paseo marítimo.
El río lleva bastante agua aunque supongo que tendrán gran cantidada apresada. El final del otoño pone los colores en las laderas del monte.
Los escasos rayos de luz no traspasan la abundante vegetación y la estrecha y maltrecha carretera está mojada toda la jornada.
Debido a una solicitud que me han hecho coloco esta foto. Para los que no la conozcan se trata de una hembra de Golden Retriever de casi cinco años de edad. Su nombre es Jara y responde con exactitud a las características de esta raza: Juguetona, comilona y perfecta para tenerla como compañía. Es de las fotos más sencillas que he hecho. Es realmente fácil encontrarla en esta posición.
La luna ha aparecido hace rato en el cielo y las nubes se han separado para dejárnosla ver.
Los últimos rayos de sol del día enrojecen el cielo fotografíado a través de las ramas desnudas de este castaño.
En esta vemos el edificio del Naútico y sobresale a la derecha la Torre de Correos.
Finalmente os pongo la foto del que es posiblemente el edificio más significativo de la ciudad (sacando la Torre de Hércules, obviamente): El Ayuntamiento
Pronto, espero, más fotos. Un saludo
Aquí va una bella estampa otoñal. Por lo que me han comentado había mucha nieve.
La persona que me ha pasado las fotos reconoce cierta pasión por las vacas... así que... una de vacas que creo que por la zona abundan.
Cerca de allí se encuentra Punta Nariga y en ella el último faro construido en España. Obra del arquitecto Portela se asemeja bastante a otros faros de nuestra costa.
Al llegar al faro, vemos la construcción de César Portela.Inaugurada en 1997, simula la proa de un barco avanzando por el mar. En el mascarón de proa del supuesto barco una escultura de Manolo Coia que en esta foto vemos de espalda.
A pesar de ser ya octubre, el día era magnífico y hacía calor. El cielo, prácticamente azul
Para acceder a la duna móvil hay que ir por una pasarela de madera muy larga y que ya está hecha un poco polvo. En esta foto se ve la duna a lo largo. En la de abajo os muestro la gran pasarela que va desde el aparcamiento hasta la playa.
El barquito en cuestión se llama Queen Elizabeth 2
Con fuerte viento de levante... como diría Trillo los tripulantes de este velero disfrutaban como enanos a todo trapo.
En la siguiente foto se ve al fondo el castillo de La Palma. En el estuvieron presos varios militares de los que participaron en el golpe de estado del 23F.
Para finalizar y con la vuelta a la ciudad de La Coruña, os muestro una foto que sólo se puede sacar desde el mar. En ella se ven el Castillo de San Antón y la Torre de Vigilancia Marítima.
Esta flor estaba triste y se escondía. Igual no quería salir en la foto 
La siguiente foto es un recorte de una mayor. Cuando la saqué no me fijé que el insecto estaba ahí.
La siguiente foto es de la playa Grande de Miño en un atardecer bastante bonito
Por último, otra puesta de sol, en este caso en la península de La Torre, que la vereis a la izquierda.
Un camino penetra en el bosque. No parece que aquí falte el agua. El verde es el color predominante.
Al caer la tarde el sol da color al embalse del Eume
En la Plaza de Azcárraga (la más importante de la ciudad en otros tiempos y hoy auténtico mercado de alimentación durante la Feria Medieval) se encuentra la Fuente del Deseo. Por sus caños, y a pesar de la sequía, mana un buen chorro de agua. Alguno de los caños incluso tiene más de un agujero.
Una de las plazas más fotografiadas de la ciudad es la de las Bárbaras. Yo sin embargo os propongo una foto del convento, y más concretamente de una torre del Convento de las Clarisas. ¿Que temen las monjas?
En la Iglesia de la Colegiata de Sta. María todavía usan velas de las antiguas y constituyen casi la única iluminación del interior del edificio.
